Vender una vivienda, a simple vista, es un proceso sencillo y claro en el que solo hay que seguir unos pasos muy definidos y, sobre todo, tener muy claro cuál es el funcionamiento y los periodos de tiempo que se suelen contemplar hasta llegar a cerrar una venta.
Sin embargo, ya sea por desconocimiento o por impaciencia, es frecuente cometer algunos errores que dificultan la venta o que pueden tener un mal efecto sobre los posibles compradores.
Afortunadamente, estos errores a evitar son sencillos de subsanar y lo más importante es contemplar todos los escenarios posibles antes de tomar una decisión y marcar unos objetivos de venta bien definidos, realistas y con ayuda de profesionales del sector inmobiliario.
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Fijar el precio por encima del mercado
Las viviendas que se ofertan por un precio superior al del mercado acaban vendiéndose por debajo de su precio. Esto es debido a que si se sobrevalora la propiedad, es muy posible que los compradores más interesados pierdan el interés y el propietario tenga que verse obligado a bajar el precio para que la vivienda se venda.
Por otra parte, es frecuente que los vendedores pongan un precio similar a las viviendas en venta de la zona, sin tener en cuenta las características y prestaciones de su vivienda, se trata de un error de sobrevaloración del inmueble.
Fijar el precio de mercado es muy importante para vender la vivienda, por lo que si nos equivocamos con este indicador, lo más recomendable es rectificar a tiempo y tener en cuenta las recomendaciones de los expertos del sector que tienen un conocimiento más profundo del mercado.
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Falta de documentación necesaria
Es muy frecuente que una vez el proceso de venta está en marcha, surjan algunos problemas legales que interrumpen o frustran la venta hasta su subsanación.
Algunos ejemplos de documentación que pueden alargar el proceso de venta pueden ser las escrituras, la cancelación de la hipoteca, el manual del edificio, etc.
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Excesiva decoración en la vivienda
Debemos presentar la vivienda lo más despersonalizada posible, mostrando sus puntos fuertes para que el comprador pueda imaginarse viviendo allí fácilmente.
Al mostrar una vivienda recargada o muy personal el comprador podrá sentir que esa vivienda no le representa y por lo tanto que le cueste más valorar cómo sería vivir allí y las posibilidades que tiene el inmueble para adaptarlo a su estilo personal.
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Mostrar la casa en malas condiciones
El comprador debe ver la vivienda limpia, ordenada y sentir un olor fresco y agradable. Algunos vendedores dejan de mantener en buenas condiciones su vivienda, porque aunque el objetivo sea desprenderse de la vivienda, se tiende a descuidar este tipo de detalles.
Es importante arreglar los desperfectos y averías, ya que pueden ser una gran barrera para el comprador y pueden causar una mala impresión ya de entrada.
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Mala negociación
Todo comprador va a tratar de negociar una bajada de precio, por lo que debemos estar dispuestos a bajar un pequeño porcentaje del precio inicial de la vivienda.
El error más común es que muchos vendedores optan por inflar el precio de la vivienda para obtener un margen de negociación. Este margen no debe superar el 20% del precio de la vivienda y debe rondar entre el 5% y 6%. Un truco, es el de redondear hacia la cifra de menor valor para lograr un mayor impacto en el posible vendedor.
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No vender al primer comprador
Es habitual pensar que si vendemos la vivienda a la primera oferta que recibamos, estamos perdiendo la oportunidad de obtener una oferta mejor. Sin embargo, cuanto más tiempo permanece un piso en el mercado, más se devalúa.
Los compradores suelen pensar que si un piso lleva mucho tiempo a la venta será por que tiene algún defecto o porque presenta problemas a la hora de gestionar la venta. Por lo tanto, una vez fijado el objetivo de venta, debemos vender sin rechazar la primera oferta esperando a que llegue otra mejor.
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Malas fotografías en el anuncio de venta
Invertir en una buena sesión de fotografía puede salirte muy rentable. Pero si quieres hacerlo por tu cuenta, lo primero que debes hacer es preparar bien la vivienda, limpiar, ordenar y simplificar la decoración.
Para tomar las fotografías busca la mejor luz, el mejor encuadre, integra la mayor cantidad de espacio posible e incluye fotos del exterior del barrio para poder mostrar servicios muy útiles, como espacios verdes o paradas de transporte público.
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Una descripción y publicidad poco realista
Lo más normal es pensar que cuantas más visitas reciba la vivienda, por estadística antes se venderá. Sin embargo, con una descripción alejada de la realidad lo único que conseguiremos será hacer perder el tiempo a los visitantes generando falsas expectativas, no una venta rápida.
Lo más razonable es ceñirse a la realidad, ser descriptivos y razonables, y esperar a que la vivienda se adapte a las necesidades de un posible comprador.
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No contar con la ayuda de un profesional
Sin duda, el mayor error a la hora de vender una vivienda es no dejarse aconsejar por un profesional. En López&López nuestro mayor interés es hacer el proceso de venta lo más sencillo posible para conseguir una venta exitosa.
Nuestros servicios cubren la valoración de mercado, un plan de marketing personalizado, la comprobación de cargas y afectaciones, la gestión documental, asesoramiento jurídico y fiscal, negociación, redacción de contratos privados, acompañamiento a notaría y servicios de postventa.
Si vas a vender tu vivienda, no caigas en ninguno de estos errores y no dudes en ponerte en contacto con nuestro equipo de profesionales para tener más información y acceder al mejor asesoramiento del mercado.