¿Qué es la ley de mediación?
La ley de mediación no es más que una ley que “impulsa” los acuerdos entre las partes, para que así los ciudadanos puedan resolver sus rencillas sin la necesidad de tener que desplazarse ante un juez (quien aplica una medida impositiva, generando vencedores y vencidos). Esta es una ley que afecta muy de cerca a los problemas que ocurren en las comunidades de propietarios, habida cuenta que la convivencia continúa y permite no deteriorar las relaciones entre vecinos, propietarios y la propia Comunidad de Propietarios.
La Consellería de justicia ha iniciado ya por su parte un trámite de información pública del anteproyecto de la ley de mediación de la Comunidad Valenciana. Se trata de una norma que se compone de un total de 47 artículos para que las disputas de los ciudadanos no acaben en un juzgado, sin duda esta ley permitirá a las Comunidades de Propietarios y Administradores de Fincas Colegiados solventar problemas típicos sin llegar a los juzgados aportando la solución las personas afectadas.
Existen un gran número de problemas o conflictos que no llegan a acabar en los tribunales y que acaban resolviéndose por vías alternativas como es el caso de la mediación; un método, que lucha por impulsar la cultura del acuerdo, la participación voluntaria, la resolución de problemas de forma civilizada, la convivencia, como es en el caso de las comunidades de vecinos y propietarios, la escucha y el reconocimiento hacia los otros.
Con la mediación se pretende restaurar los lazos sociales, al ser un procedimiento que se caracteriza por la intervención activa de un individuo que tiene el rol de mediador profesional, para que ayude a buscar la solución al conflicto, figura que en algunos casos puede alcanzar el administrador de fincas Colegiado que se ha formado para ello, ejerciendo un papel neutral e imparcial facilitando así la puesta en común de diferentes posturas para que surgan las posibles soluciones.
Descubre en qué te puede ayudar la nueva ley de mediación
La mediación se configura como un sistema de intermediación a través de un “mediador” como puede ser un administrador de fincas Colegiado y “gravita” en torno a la voluntariedad y libre decisión de la totalidad de las partes, con la ayuda y la moderación de terceros profesionales, alcanzando así las soluciones entre los afectados, por ejemplo en una comunidad de propietarios con vistas a mejorar las relaciones futuras de los vecinos que la componen.
De esta forma, la ley de mediación establece en la Comunidad Valenciana un marco regulador general y común para conseguir la mediación, poniendo así a disposición de la totalidad de la ciudadanía el activo de la mediación como una parte imprescindible del derecho de acceso a la justicia.
Por ello, la ley de mediación otorga un gran número de ventajas a la ciudadanía, que puede obtener como un activo más de la ley, una normativa que permite por ejemplo a un vecino de una comunidad de propietarios a través de la intervención de un administrador de fincas colegiado (mediador), solventar problemas con rapidez, que en circunstancias normales podría llegar a juicio, entorpeciendo la convivencia presente y futura entre los afectados. Por este motivo, decimos que la nueva ley de mediación es una ley ideal para las comunidades de propietarios, pues en pocos sitios se requiere con tanta necesidad este tipo de soluciones.