Se considera reforma a cualquier tipo de remodelación en un inmueble, ya sea parcial o total. Para su realización, la ley exige la necesidad de tener un permiso de obra.
El permiso de obra suele requerir trámites y pago de tasas, dependiendo del impacto que tenga la obra en el entorno y las licencias que sean necesarias. Este permiso, además de autorizar la modificación de la vivienda, permite la colocación de un contenedor de escombros mientras dura la obra. Sin embargo, dependiendo de las leyes específicas de cada ayuntamiento, así como el tipo de obra, las regulaciones pueden variar, así como los requerimientos para hacer las tramitaciones.
La licencia determina el grado de complejidad de la obra, de esta manera sabremos si es necesaria la supervisión de un profesional o no. El grado de complejidad se basa en los rangos de obras que la ley establece, que van desde las más sencillas a las más complejas que requieren de la aprobación de un profesional y la presentación de un proyecto para su aprobación.
Los permisos según el tipo de obra son los siguientes:
- Obras exentas: debido a la sencillez de las mismas, no es necesario ningún tipo de permiso.
- Obras sencillas: requieren de un trámite con el ayuntamiento para poder sacar los escombros en sus contenedores, pero pueden ser ejecutadas sin la supervisión de un arquitecto o ingeniero.
- Obras que requieren de documentación y supervisión: la complejidad de estos procesos requiere de permisos específicos y de personal capacitado, como puede ser un técnico o ingeniero que se asegure de cumplir con todas las medidas de seguridad y garantizar que cualquier derrumbe o reforma no va a tener consecuencias sobre la estructura de la casa y el edificio.
Obras que requieren solicitud de permiso de obras:
- Reformas de acabados: en este permiso se indica la restauración o sustitución de acabados, como por ejemplo pintar o cambiar el suelo. No siempre se requiere un permiso pero sí se debe emitir un comunicado de obra. En el caso de generar residuos y necesitar contenedores que ocupen sitio en la calle, sí se necesita un permiso. Además se deberá pagar de 0.96 a 4.78 euros por día dependiendo de la proporción y zona.
- Reformas que modifican la distribución de la vivienda: estas reformas pasan por reformar de dos a tres dormitorios, cambiar el baño o la cocina. Para ellas se necesita una cédula de habitabilidad actualizada, los planos del estado previo de la vivienda, el presupuesto de obra, una memoria en la que se reflejen los cambios y una plano de la situación. Junto a la documentación se debe presentar el pago de la tramitación que suele ser de 287.70 euros por superficie de 500 metros cuadrados, el 4% del presupuesto y el impuesto por contenedor.
Los costes de cada trámite según el tipo de permiso son:
- La tasa por prestación de servicios urbanísticos, que es la que cubre el trabajo administrativo generado por la tramitación de la licencia.
- Impuesto de construcciones, instalaciones y obras; el 4% de la base imponible del presupuesto de obra.
- Tasa por la utilización privativa del dominio público local, este impuesto se aplica cuando es necesario ocupar la vía pública con contenedores, andamios o maquinaria. El coste dependerá de la ubicación, tiempo y tasas de la zona.
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